La soledad es uno de los sentimientos más arraigados en el corazón de las personas. En ocasiones por qué no queremos abrir los ojos para ver a nuestro alrededor y otras por que en verdad y por alguna razón, nos hemos alejado de la sociedad, a tal punto que no encontramos el camino de vuelta.

Nos vamos aislando como una forma de protegernos del daño que nos ocasionan las personas y del daño que hemos ocasionado. Llegamos a pensar que estamos a salvo en este “rincón” que hemos creado para vivir, pero este es un grave error, porque somos seres sociales y necesitamos de otros para ser felices.